En el marco del Día Mundial del Sueño, repasamos la importancia del sueño en los niños para su desarrollo y cómo puede verse afectada su salud si no se consigue un descanso reparador. Recomendaciones para lograrlo.
La importancia del sueño
En este contexto de pandemia y comienzo de clases, en donde los hábitos y rutinas se vieron modificadas y atravesadas por la emergencia sanitaria, se vuelve más importante que nunca cuidar el descanso de los niños.
El sueño es una de las necesidades básicas de los menores, una función evolutiva que requiere de la maduración del sistema nervioso. En la infancia, el sueño se encuentra en desarrollo y es imprescindible para un adecuado crecimiento físico y desarrollo neurológico y emocional del niño. De ahí la importancia de dormir las horas necesarias y que este sueño sea efectivo y proporcione un descanso reparador.
Para lograr esto, resulta indispensable establecer una rutina antes de ir a dormir.
Recomendaciones para lograr un sueño efectivo en los niños
- Establecer un horario regular a la hora de acostar y despertar todos los días al niño, hacer siempre lo mismo, incluidos los fines de semana, desde los primeros meses de vida. Hasta los 5 años el niño debería dormir la siesta después de comer.
- Rutinas agradables para irse a dormir: baño, cena, habitación con luces bajas, canciones de cuna, leer un cuento, crear un entorno que le permita al niño ir asociando ese estímulo con la hora de ir a la cama.
- No acostumbrarlo a dormir alimentándose, acunándolo, o paseando en el cochecito o en el auto, ya que cuando se despierte y se encuentre solo, va a reclamar volver a esa situación. Acostarlo despierto en su cuna, para que aprenda a conciliar el sueño solo. Al principio puede costar, se pueden usar objetos como algún peluche o muñeco que sea seguro para su edad y que permanezcan con él toda la noche y que solo se utilice con este fin, al acostarlo se lo damos para que asocie el muñeco con dormir.
- Evitar bebidas estimulantes como el café y el té, pero también las bebidas de chocolate y cola.
- Evitar mirar la televisión, el uso de pantalla, cuentos atemorizantes, o actividad física enérgica una hora antes de irse a dormir.
¿Qué problemas pueden generarse si no se consigue un descanso reparador?
- Verse afectado el desarrollo físico del niño impidiendo el correcto crecimiento.
- Pueden provocarse trastornos del aprendizaje, efectos negativos en las funciones cognitivas, emocionales y conductuales.
- Se afecta el desarrollo emocional y social provocando trastornos de relación, cambios de humor, irritabilidad, fatiga.
- Pueden generarse microsueños diurnos que lo harán pasible de cometer errores y omisiones. Hiperactividad. Pérdida de la atención. Enlentecimiento cognitivo, declinación de la velocidad de cálculo, que harán incrementar el riesgo de accidentes.
Consideraciones a tener en cuenta
Si bien el dormir es un hábito que se aprende, no todos los bebés son iguales frente al sueño. Hay bebés más tranquilos, y otros más demandantes que presentan distintas características como despertarse a la noche y requerir la presencia del papá o la mamá.
Muchas veces los trastornos del sueño de los bebés son el reflejo de situaciones de angustia en la familia, conflictos de pareja, situaciones traumáticas o de estrés, que no genera esa sensación de tranquilidad y seguridad que necesita el niño.